Desanimada por la desidia de los medios de comunicación, que llegan a hacer bandera de la incultura.
Desanimada por la falta de honradez y la falta de transparencia.
Desanimada por la traición de aquellos que ocultan sus mentiras bajo un halo de amiguismo.
Desanimada por lo retrógrado de los fanatismos.
Desanimada por la lucha constante contra el qué dirán.
Desanimada por ...
Y a pesar de tanto desánimo siguen existiendo seres humanos maravillosos por lo que debemos apostar "a ganador".
Cuadro: Desánimo de Antoni Lasheras,