El lecho, con dosel,
enarbola cuatro pináculos que ascienden hacia un cielo imaginario,
torneadas columnas que emulan detalles florales y un cabezal que
mantiene la misma estructura, todo envuelto por sedas que crean una
atmósfera propicia para los juegos de pareja. Toda ella impone. Su
amplitud no deja indiferentes a aquellos que degustan sus caricias,
generando en el que la habita un estado de bienestar que te arropa y
te sumerge en los dulces brazos de Morfeo.
Imagen: Hotel Etxegana
Imagen: Hotel Etxegana
H.ola Antonia, esta habitación me transmite relajación, paz, bienestar, placer...
ResponEliminaUn beso.