¡Cuánto hemos crecido con los años!, ¡cuántas horas
de luces y sombras acumulan nuestras retinas!, ¡cuánta sabiduría nuestro
cerebro! Pero, ¿qué no daríamos por volver, en algún momento, a la ignorancia
del pasado o a la frescura de la niñez?
Fuente imagen: Nuestro Tiempo, revista Universidad de Navarra
Hola Antonia, Ni por un instante volvería a mi niñez. Desearía borrar de mi memoria todos los recuerdos tristes que tuve que vivir. No pude aprender a jugar, no me dejaron ser niña, me encantaba estudiar pero me lo negaron, no recibí el cariño ni la protección que a esa corta edad se necesita. Pero la vida me ha dado otra oportunidad. Ahora soy adulta y mi vida ha cambiado sustancialmente. Mi familia me arropa, me da amor, mucho amor, todas las carencias que tuve se han desvanecido gracias a ellos.
ResponEliminaEs una historia tan triste como cierta.
Un abrazo fortísimo.
Cuando se han vivido experiencias traumáticas en la infancia ese retorno posiblemente no sea la mejor opción, pero cuando hablo de esa ignorancia y esa frescura me refiero a eso, a descubrir, a verlo todo por primera vez, a asombrarte de cosas sencillas, a crear mundos imaginarios donde todo acaba bien, a soñar, a reír, a jugar... sin el miedo al mañana.
ResponEliminaUn besazo
Me encantaria volver por un dia, llegar del colegio y mi madre me daba un trozo de pan con miel de caña para merendar (no habia para más) la garrafa del agua vacia esperandome para ir al manantial. Pero lo que más me gustaria es volver a abrazarla, besarla, su inconfundible olor, decirle Te Quiero, solo por un dia. Qué no daria?
ResponElimina¡Qué bonito recuerdo! y cuánto lamentamos no decir todo lo que sentimos a los que más amamos, ¡cuánto nos cuesta expresarlo! aunque siempre nos queda el consuelo de que ellas (nuestras madres) siempre saben cuánto las queremos.
ResponEliminaUn beso
Correr, saltar, gritar por el campo, ponerte las botas de agua el dia de lluvia, saltar por todos los charcos y llegar a casa con barro hasta las orejas, la bronca de mamá y papá. Me encantaría regresar un dia de lluvia!!!! Y soñar y creerte que puedes volar, pues yo me creia que volaba, bueno, ahora sé que no es posible. jejeje. Gracias Antònia, por unos momentos he viajado al pasado. Me has hecho feliz.
ResponEliminaUn beso
Me alegra saber que con pocas palabras he conseguido hacer renacer en ti aquellos recuerdos escondidos en ese baúl de la memoria. Nunca podré agradeceros lo suficiente vuestras palabras.
ResponEliminaUn beso