
No podían lanzarse a la hoguera de las locuras y dejar de lado todo por lo que habían luchado. No debían destruir de un plumazo aquello a lo que tanto habían amado. Pero siempre seguirán soñando, ambicionando unos besos que nunca llegarán. Sus miradas se cruzarán, transmitiendo sus sentimientos ocultos en la profundidad de un mar de tensiones, podrán comprobar que el hechizo no se ha roto y eso hará que se mantengan en pie, que cada mañana abran las puertas y dejen entrar esas ráfagas de aire fresco que alivien las cadenas que coartan sus anhelos.
Fuente cuadro: Amores Prohibidos de Stella Sidi
donen pessigolles a l'ànima i fan una lleu ganyota la qual dóna vida per un moment, la gosaria de pensar-hi ja és una bogeria que t'esborrona l'esperit i és un alè infinit
ResponEliminajo fins a les tres